martes, 5 de mayo de 2020

Análisis: Los sonetos de la muerte.

Comentario: Los sonetos de la muerte. Gabriela Mistral.


Este es por lejos uno de mis poemas favoritos, tenía 12 años cuando lo escuché por primera vez en una clase de lenguaje. La profesora nos dio la tarea de memorizar una parte para disertar sobre él, la actividad era en parejas, una parte se encargaba de aprender la biografía de Gabriela, y la otra parte memorizaría el poema. Me gustó tanto que me lo aprendí completamente. Este poema fue el que le permitió ganar el concurso literario de los Juegos Florales en 1914. Les dejo el poema para comentarlo más adelante...

Los sonetos de la muerte.

I

Del nicho helado en que los hombres te pusieron,
te bajaré a la tierra humilde y soleada.
Que he de dormirme en ella los hombres no supieron,
y que hemos de soñar sobre la misma almohada.

Te acostaré en la tierra soleada con una
dulcedumbre de madre para el hijo dormido,
y la tierra ha de hacerse suavidades de cuna
al recibir tu cuerpo de niño adolorido.

Luego iré espolvoreando tierra y polvo de rosas,
y en la azulada y leve polvareda de luna,
los despojos livianos irán quedando presos.

Me alejaré cantando mis venganzas hermosas,
¡porque a ese hondor recóndito la mano de ninguna
bajará a disputarme tu puñado de huesos!

II

Este largo cansancio se hará mayor un día,
y el alma dirá al cuerpo que no quiere seguir
arrastrando su masa por la rosada vía,
por donde van los hombres, contentos de vivir...

Sentirás que a tu lado cavan briosamente,
que otra dormida llega a la quieta ciudad.
Esperaré a que me hayan cubierto totalmente...
¡y después hablaremos por una eternidad!

Sólo entonces sabrás el por qué no madura,
para las hondas huesas tu carne todavía,
tuviste que bajar, sin fatiga, a dormir.

Se hará luz en la zona de los sinos, oscura:
sabrás que en nuestra alianza signo de astros había
y, roto el pacto enorme, tenía que morir...

III

Malas manos tomaron tu vida desde el día
en que, a una señal de astros, dejara su plantel
nevado de azucenas. En gozo florecía.
Malas manos entraron trágicamente en él...

Y yo dije al señor: "Por las sendas mortales
le llevan. ¡Sombra amada que no saben guiar!
'Arráncalo, Señor, a esas manos fatales
o le hundes en el largo sueño que sabes dar!

¡No le puedo gritar, no le puedo seguir!
Su barca empuja un negro viento de tempestad.
Retórnalo a mis brazos o le siegas en flor".

Se detuvo la barca rosa de su vivir...
¿Que no sé del amor, que no tuve piedad?
¡Tú que vas a juzgarme, lo comprendes, Señor!

Escogí este poema como el primer texto para compartirles porque es simplemente perfecto. Si me preguntaran cuál es mi poema favorito, respondería que sin duda este es uno de ellos.
La profundidad de los sentimientos que Gabriela nos entrega através de este escrito es impresionante.

En el colegio cuando me mostraron el poema por primera vez, la profe dijo que este poema Mistral lo escribió por la muerte de Romelio Ureta Carvajal, su ex novio. Resulta que comenzaron a salir en 1907, él era un empleado ferroviario que no tenía dinero. Él decide irse al norte en busca de fortuna y con la promesa de volver por su amada. Lamentablemente vuelve, sin dinero y termina con ella. La dejó por otra mujer que tenía más dinero y de la cuál podía sacar provecho (son distintas las versiones que existen en relación a esta ruptura, la que yo les comento es la que me contó mi profesora, ahora bien, analizando este poema y también escritos como: la balada o, la otra, tiene mucho sentido de que la ruptura fuese porque la cambió por otra persona).

En 1909 Ureta hurta una caja con dinero de su trabajo y al verse desesperado decide suicidarse de un disparo. En la solapa de su chaqueta se encontró una carta y una foto de Gabriela, por lo que en su momento muchos la culparon por su muerte, otros aseguran que se suicidó porque lo descubrieron robando y cada cual es libre de aceptar la postura que más le acomode. No obstante, si algo es seguro, es que que él aún la amaba aunque la dejó por otra, por lo que la teoría de que la dejó por alguien con más dinero toma más sentido aún. Luego de enterarse de lo sucedido Gabriela decide escribir este poema. 

Respecto a la primera parte, muchos se van a lo literal al pensar que le escribe a un hijo muerto, pero en realidad es una metáfora de la forma en como trataría a su amado muerto, y la parte de: "Me alejaré cantando mis venganzas hermosas, ¡porque a ese hondor recóndito la mano de ninguna bajará a disputarme tu puñado de huesos!" Confirma una vez más la teoría de que él la dejó por otra.

En la segunda parte, en el primer verso habla de la vejez, y el lugar donde van los hombres contentos de vivir... es la vida en sí, que viven los jóvenes, que tienen sueños y energía para cumplirlos, no así los ancianos que están cansados.
Segundo verso: "sentirás que a tu lado cavan briosamente..." Hace alusión a que cuando ella muera, espera que la entierren junto a él. Cuando nos habla de: "tuviste que bajar sin fatiga a dormir..." obviamente se refiere al hecho de que no murió de viejo o por alguna enfermedad, murió porque se suicidó a temprana edad. En el último verso de la segunda parte vemos que los sinos, tienen que ver con el destino, en este caso la muerte, pues bien, cuando ambos se encuentren después de la muerte habrá luz porque de cierta forma estaban destinados por los astros a estar juntos, y por la misma razón se desprende, que el muere antes por haber roto el enlace.

En la tercera y última parte, está el desenlace donde ya, abiertamente le reprocha su falta al dejarla por otro: "malas manos entraron trágicamente en él..." Luego menciona una oración -cabe destacar que Mistral era muy creyente, de hecho en un de sus poemas hace alusión a que no es digna de ser llamada maestra igual que Jesús-. Ahora bien, esta oración que hace, expresa que la relación que ahora tiene su amado no lo llevará a buen puerto, por eso le dice: "retórnalo a mis brazos o le siegas en flor..." en otras palabras, lo que está pidiendo es: o está conmigo, o que Dios lo mate para que no esté con nadie más.

El último verso, es el que más me gusta por la intensidad de emociones que trasmite. Pues aquí vemos que el amado no volvió con ella, por ende murió, y debido a su plegaria en el texto anterior se podría pensar que ella, de alguna forma, es la responsable de la muerte del amado, y por eso ella responde: "¿Que no sé del amor, que no tuve piedad? ¡Tú que vas a juzgarme, lo comprendes, Señor!" Porque todos pueden criticar la forma de actuar o de pensar de un corazón despechado o herido, pero a menos que pases por esa experiencia podrás saber qué se siente realmente, y sólo ahí podrás saber si tu actuarías igual de manera distinta.

Como les decía antes, lo bello del poema es que Gabriela logra trasmitir las emociones que la embargan al momento de escribir, es tal la intensidad con la que expresa sus ideas, que notamos claramente su dolor, desilusión,  un poco de amargura, pero en el fondo también la resignación. Todo lo que expresa nos lleva a pensar que a pesar de que ya no estaban juntos, y que Romelio no fue honesto con ella y la dejó, aún así ella lo seguía queriendo, de la misma forma en que el también todavía la quería, de lo contrario no hubiese estado guardando una fotografía de ella.

Espero les haya gustado este poema, se que es bastante triste hablar sobre la muerte, pero no todos los poemas deben ser sólo felicidad...

Atentamente,

Carli-queen <3

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